Viaje a China – La Gran Muralla

Tras las visitas del día a la Tumba del Emperador y a la fábrica de jarrones Cloisonné de Beijing, nos dirigimos a uno de los puntos fuertes del viaje: La Gran Muralla China. Con una extensión de más de 6000 km, es uno de los principales atractivos turísticos del gigante asiático. En la actualidad, la mayor parte de la muralla está en ruinas, pero el gobierno Chino ha acondicionado varias zonas, restaurandola para que recupere su antiguo esplendor y el viajero pueda maravillarse con la inmensidad que abarca. La zona más turistica es Badaling, pero nosotros fuimos a Mutianyu. Se trata de una zona menos turística que la anterior, y sobre todo frecuentada por turismo interno Chino.

Mutianyu es una enorme fortificación cuadrada de mas de 2 kilometros de lado. La gracia que tiene todo el asunto es que te llevan al pie de la muralla, y alli tu subes hasta donde quieras puedas. El inicio esta situado justo al pie de una montaña, y la subida es durísima. En las fotos quizá no se aprecie del todo la pendiente, pero es espectacular.

A medida que vas subiendo, se pueden ver como los fragmentos de la muralla aparecen en el horizonte. Impresiona muchisimo, tanto por la longitud, como por la pendiente. Es increible que fueran capaces de edificar una construcción asi en un terreno tan dificil.

Una de las cosas más interesantes que nos contaron era que la muralla no tenía únicamente una función defensiva, sino tambien informativa. Cada cierta distancia hay torretas de vigilancia donde vivían soldados. Estos soldados tenian una serie de códigos de señales de humo para informar de los avances de las tropas enemigas. Si divisaban una destacamento prendian el humo de torre en torre, y así eran capaces de transmitir la información de punta a punta del imperio en un solo día!!! Para tratarse de hace 2000 años, está bastante bien.

Otra cosa interesante era con qué hacían el humo. Utilizaban excrementos de lobo, porque el humo es muy espeso, y no se lo lleva el viento: mejoraba la visibilidad. Increible.

Ésta última foto es muy graciosa. El cartel negro del fondo dice «Certificados de haber subido la gran muralla». Hacia la mitad de la subida te hacían una foto y te daban un certificado oficial de que habias subido. Pobre hombre el que tiene que subir hasta allí todas las mañanas para trabajar :S

Cuando llevabamos hora y media más o menos subiendo, Verónica dijo que ya no subía más. ¿Os había dicho que el ascenso es duro de cojones? XD. Pero yo ya que estaba allí, hasta que no me reventara el pecho no estaba dispuesto a parar, asi que seguí para arriba como un campeón!! jejeje. En las dos siguientes fotos veis donde la dejé, y hasta donde subi yo.

Ella está en la segunda torre hacia abajo, para que os hagáis a la idea de la distancia y el tamaño que tiene esto. Tiempo extra de subida: unos 45 minutos. Y aquí es donde el corazón dijo basta. Si seguia para arriba me iba a dar mal, así que aquí me quedé.

Y aquí una de las cosas que me llamaron mucho la atención. Abajo de todo, en la base hay un puestuco de bebidas. Cuesta 5 Yuanes (unos 50 centimos) el botellín de agua. Pués donde llegué yo había otro puesto. Nada del otro mundo, una nevera, una sombrilla y un chino vendiendo bebidas. Pues la misma botella costaba LO MISMO!!!! Y eso despues de que algún pobre haya estado mas de 2 horas subiendo con un fardo lleno de botellas… Me venían a la cabeza los precios en los puestos de las playas de España: igualito que en China, oigan XD.

Otra de las cosas que llaman la atención es la enorme cantidad de turistas que hay, pero no turistas occidentales, la grandísima mayoria eran chinos. Mao dijo una vez que «si algún Chino no ha subido la Gran Muralla, entonces no será un hombre verdadero». Asi que la muralla es un auténtico lugar de peregrinacion para ellos. Y lo que más sorprende es que ves desde familias con niños pequeños (pero pequeños de un par de años) subiendo con ellos a cuestas, hasta ancianos de probablemente más de 80 años. Estos últimos subiendo más frescos que una lechuga, y yo allí, que casi echo los pulmones por la boca… hay que ponerse en forma.

Referente a la pila de gente que visita la muralla, podeis ver los escalones gastados en la foto del Chino sin zapatos XD. Imaginaos milcienes de chinos subiendo por ahí todos los días… Cualquier día de estos habrá que hacer una reforma!!

Y una vez mas, me encontré con la amabilidad de la gente. Todos sonrientes, encantados de hacerse fotos contigo, saludándote y dándote las gracias por cualquier cosa.

En fin, aquí terminó la visita a la Gran Muralla. El resto del día fue un viaje a Beijing al hotel en el que fuí catatónico, y por la noche la visita al Mercado de la Seda, que merece un post para él solito. Ése será el siguiente.